Le perdono a Alan Moore que llamase subnormales emocionales a los lectores de cómics de superhéroes. Me da que en el resto de declaraciones sobre en lo que se ha convertido la industria lleva bastante razón. Lo de la censura en la reimpresión de Miracleman ha sido pasarse. Eso que han coloreado ya no es la obra. Y el mensaje final es asqueroso. Vamos para atrás. Voy a comprar todavía menos de Marvel. Aquí un enlace a la obra original sin censuras y gratis.
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