Vista la película de Suicide Squad no puedo más que corroborar lo que las criticas advertían. Otra decepción de adaptación cinematográfica de personajes de DC Comics realizada por Warner Bros. No se puede comenzar una película con un aluvión de flash-backs. La excusa de la formación del grupo es absurda. Como se vio en Batman V Superman: Dawn of Justice, muere Superman, hay que recordar que Superman en el DC Extended Universe no es que sea muy bien aceptado por el gobierno americano y a Amanda Waller, interpretada con unas muy notorias pocas ganas por Viola Davis, lo mismo pasa con la Enchantress de Cara Delevigne, se le ocurre reclutar a un grupo de villanos poniéndoles únicamente como seguridad de fidelidad un collar en el cuello como si de perros se tratasen. Según va pasando la historia más da la impresión de estar viendo un vídeo musical de dos horas y pico y el Joker de Jared Leto no me parece siquiera que sea el Joker. Sin sonrisa y con la única mediana confrontación de una correcta Harley Quinn interpretada por Margot Robbie pero cuyo personaje en la película dista del que se puede ver en cómic.
Pero...la película ha batido el record de mejor estreno cinematográfico en agosto con 147 millones de dólares. Y Jared Leto dice que su Joker está basado en David Bowie. El David Bowie de Ziggy Stardust, es que hubo tantos. Lastima que para mi el único Joker continue siendo el interpretado por Heath Ledger.
¿Spin-offs? No parece que haya posibilidades de ninguno. Y espero que no haya continuación en un Suicide Squad 2.
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